Cuando tenemos invitados en casa y sacamos las botellas de vino, que caiga una sola gota de vino en nuestro sofá supone un suspiro general y varias caras de lástima. No hay solución, ¿o sí? Pues, aunque parezca imposible, se pueden quitar las odiosas manchas de vino. ¿Cómo? Os dejamos los detalles a continuación.
Consejos para eliminar las manchas de vino
Para quitar las manchas de vino de una vez por todas, os dejamos con los siguientes consejos:
-Sal: Esta fórmula es fantástica para hacer desaparecer las manchas de vino de nuestras alfombras. Cuando caiga el preciado líquido, retiraremos todo lo que podamos con una servilleta de papel y los restos los cubriremos con sal. Tanta que no se vea prácticamente la mancha. Dejaremos que repose durante un rato y cuando esté seca aspiraremos para quitar toda la sal empapada por el vino.
-Lejía: Este proceso debe llevarse a cabo con mucho cuidado y sobre superficies blancas. Cogemos el trozo de tela de sofá o de alfombra manchado y lo sumergimos en lejía durante 10 ó 15 minutos. Recuerda que la lejía sólo es útil si se trata de tela blanca.
-Amoniaco y detergente para lana: Otra fórmula ideal para quitar las manchas de vino sobre alfombras. Se disuelve una cucharada de detergente para lana en un vaso de agua tibia, añadimos una cucharada de amoniaco y humedecemos una esponja. Frotamos con cuidados la mancha y aclaramos con agua y vinagre. Este método no tiene porqué ser inmediato por lo que es posible que debamos repetir el proceso hasta que desaparezca la mancha.
-Agua oxigenada y detergente: Mezclamos a partes iguales el detergente, que debe ser líquido, y el agua oxigenada. Rociaremos sobre la mancha la mezcla y esperaremos a que el producto absorba el vino. Esta recomendación es muy útil para elementos textiles de colores claros.
-Lejía diluida: Si nuestro ha caído vino sobre nuestro mármol y no lo hemos visto hasta que la mancha se ha oscurecido, podremos quitarla con un trapo humedecido en un poco de lejía diluida en agua. Así de fácil.
-Vinagre blanco y detergente: Tapamos la mancha con vinagre blanco, un producto ideal para eliminar los pigmentos propios del vino. Después, frotaremos la zona afectada con detergente para luego lavarlo todo con agua caliente.
-Vino blanco y leche hervida: Una mezcla un tanto singular, ¿no? Empapamos la mancha con vino blanco y luego introducimos la zona manchada en un recipiente con leche hirviendo. Después, frotamos el área con agua fría y amoniaco. Es posible que tengamos que repetir el proceso varias veces.
-Polvos de talco: Sólo será efectivo si la mancha todavía está húmeda. Aplicamos polvos de talco sobre la mancha, los cuales absorberán parte de la mancha. Cuando se seque, frotaremos con suavidad para quitar los polvos. Seguidamente enjuagaremos con agua.
-Agua con gas: Humedecemos con agua con gas un paño y frotamos con él la zona manchada. Dejamos secar y después enjuagamos.
En estos casos de manchas de vino, de salsas, de helados, etc. resulta vital contar con un buen equipo de limpieza en el hogar. Un equipo capaz de batallar a nuestro lado en la limpieza cotidiana del hogar. Puestos a ofrecer consejos, recomendamos el equipo multifuncional Kirby Avalir. Este aparato puede cumplir con muy diferentes tareas y funciones. Y es que, en una única máquina, podemos pulir, aspirar, renovar, centrarnos en la eliminación de manchas, ejercer compresión…
Decenas de funciones y, sin embargo, muy sencillo de utilizar. Además, Kirby Avalir viene con una interesante y amplia gama de accesorios para que, a la hora de la limpieza general, podamos acceder a esos ángulos más cerrados o esas áreas inaccesibles y eliminar las manchas más imposibles.
Igualmente os recomendamos este producto quita-manchas para eliminar este tipo de suciedad, la presencia de pegamento, chicles o pegatinas, entre otras muchas cosas.
Las manchas de vino podrán ser eliminadas sin necesidad de frotar una y otra vez. Y no solo podremos limpiar la mancha, si no que con Kirby podremos limpiar la alfombra o el sofá enteros. ¿Qué os parece la idea?
